Ingredientes para 2 personas:
- Aceite de oliva "virgen extra", 3 cucharadas
- Ajo, 2 dientes
- Champiñones, 250 gr
- Guindilla, 1
- Huevo tamaño grande, 1
- Macarrones, 200 gr
- Nata fresca, 200 ml (un brick)
- Perejil picado, una cucharada sopera
- Queso parmesano rallado, 2 cucharadas soperas
- Sal fina, cantidad al gusto
- Sal gruesa, 1 cucharada sopera (para hervir la pasta)
Utensilios:
- Cacerola grande
- Cuchara de madera
- Cuchara sopera, te servirá para medir el queso rallado, el perejil picado y la sal gruesa
- Cuchillo grande para cortar
- Paño de cocina
- Sartén antiadherente
- Tabla de cocina para cortar
Elaboración:
Comienza hirviendo los macarrones en abundante agua con una cucharada de sal gruesa el tiempo que indique el fabricante del paquete.
Cuando los macarrones estén "al dente", escúrrelos sobre un colador grande, enjuágalos unos segundos bajo el chorro del agua fría del grifo, vuélvelos a escurrir y reserva.
Seguidamente frota los champiñones con un paño húmedo con el objeto de limpiarlos y lamínalos.
Después pela y pica los dientes de ajo.
A continuación vierte tres cucharadas de aceite de oliva en la sartén y caliéntalo a fuego medio-alto, nº 7 de la placa vitrocerámica.
Cuando el aceite esté caliente echa los dientes de ajo y sofríelos hasta que estén ligeramente dorados.
Después de esto introduce los champiñones laminados junto a una poquita de sal fina y sofríelos durante 8-10 minutos o hasta que estén dorados, removiendo de vez en cuando con la cuchara de madera.
Transcurrido el tiempo, añade la guindilla troceada.
Seguidamente añade la nata y el huevo crudo. Déjalo hacer durante 2 minutos a fuego medio, removiendo continuamente con tu cuchara de madera.
Después de esto agrega los macarrones y mézclalo todo bien.
A continuación calienta el conjunto a fuego medio y sirve.
Por último espolvorea cada plato con un poco de perejil picado y una cucharada de queso parmesano rallado.
Sencillos y deliciosos
"El verano siempre es mejor de lo que podría ser"