"Cádiz, salada claridad.
Granada, agua oculta que llora.
Romana y mora, Córdoba callada.
Málaga cantaora. Almería dorada.
Plateado Jaén. Huelva, la
orilla de las tres carabelas...
y Sevilla".- Manuel Machado.
Ingredientes para 2 personas:
- Aceite de oliva "virgen extra", 5 cucharadas
- Ajo, 2 dientes
- Alcauciles o alcachofas, 4
- Almejas, 250 gr
- Cebolleta, 1
- Harina de trigo, una cucharadita
- Limón, un trozo
- Patatas, 500 gr
- Pimentón dulce, una cucharadita
- Pimienta negra molida, cantidad al gusto.
- Pimiento verde italiano, 1
- Sal fina, cantidad al gusto
- Sal gruesa, un puñado (para el remojo de las almejas)
- Vino blanco seco, 1/2 vaso
Utensilios:
- Bol grande
- Cacerola mediana con su tapadera
- Cuchara de madera
- Cucharilla pequeña, para medir la harina y el pimentón
- Cuchillo grande y afilado
- Escurridor grande
- Sartén mediana con su tapadera.
- Tabla de cocina
Elaboración:
Compra las almejas el mismo día de la elaboración de la receta. Cuando llegues a casa, saca las almejas de la red, colócalas en un bol, cúbrelas con agua del grifo y échales un puñado de sal gruesa. Déjalas en romojo por espacio de dos horas.
Transcurrido el tiempo, escúrrelas, vuélvelas a enjuagar y reserva.
Tras esto, pela y pica la cebolleta en dados.
Seguidamente despepita y pica el pimiento verde también en dados.
A continuación vierte tres cucharadas de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio-bajo, nº 4 de la placa vitrocerámica.
Cuando el aceite esté caliente echa la cebolleta, el pimiento y una poquita de sal fina. Remueve con tu cuchara, tapa la cacerola con su tapadera y deja que las hortalizas se ablanden por espacio de quince minutos.
Mientras tanto quita las hojas mas duras de los alcauciles, pártelos por la mitad y frótalos con un trozo de limón para evitar que se ennegrezcan.
Seguidamente pela las patatas y trocéalas en cachelos.
Transcurrido el tiempo destapa la cacerola, añade las patatas, las alcachofas, una poquita de sal fina y la cucharadita de pimentón dulce, remueve unos segundos e inmediatamente cubre con el agua necesaria hasta cubrir las patatas. Cocer durante 20 minutos o hasta que las patatas y los alcauciles estén tiernos.
Casi al final del guiso, pela y pica en láminas los dientes de ajo.
Vierte las otras dos cucharadas de aceite de oliva en la sartén y caliéntalo a fuego medio-fuerte, nº 7 de la placa vitrocerámica.
Cuando el aceite esté caliente (no humeante), echa los dientes de ajo y fríelos.
Cuando los dientes de ajo comiencen a dorarse añade la cucharadita de harina, cocina brevemente y añade el vino y las almejas. Tapa la cacerola, sube el fuego al máximo y deja que las almejas se abran.
Cuando las almejas estén abiertas (desecha las que estén cerradas), vierte el contenido de la sartén a la cacerola, cocina durante un minuto más y sirve.
*Incorpora las almejas al guiso cuando las patatas y los alcauciles estén tiernos. Las almejas necesitan muy poco tiempo de cocción, si te excedes cocinándolas te quedarán muy duras.
Sirve caliente.
Disfruta.
“Me acuso de no amar sino muy vagamenteuna porción de cosas que encantan a la gente.”-Manuel Machado