621.- Croquetas de berenjenas # Recetas para la crisis

Ingredientes:

• Aceite de oliva, 2 cucharadas soperas
• Berenjenas tamaño grande, 2
• Cebolla, 1
• Harina de trigo, 70 gr
• Leche entera, 700 ml
• Mantequilla, 70 gr
• Nuez moscada, cantidad al gusto
• Pimienta negra molida, cantidad al gusto
• Sal fina, cantidad necesaria

Para rebozar:

• Aceite de girasol para freír
• Huevos
• Pan rallado

Utensilios:

• Cuchara de madera
• Cucharillas para darle forma a las croquetas
• Cuchillo mediano de cocina
• Espumadera
• Film transparente
• Papel de cocina
• Platos hondos para empanar las croquetas
• Plato llano
• Sartén grande y antiadherente con tapadera
• Sartén honda para freír
• Tabla de cocina
• Varillas manuales

Elaboración:

Comenzamos pelando y picando la cebolla en trozos pequeños.

Seguidamente pela (opcional, yo no le quito la piel) y pica en trocitos pequeños las berenjenas.

A continuación añade dos cucharadas de aceite de oliva a la sartén y caliéntalo a fuego medio-bajo, nº 4 de la placa vitrocerámica.

Cuando el aceite esté caliente echa la cebolla, añade una poquita de sal fina, remueve, tapa la sartén y deja que la cebolla se ablande por espacio de 10 minutos.

Transcurrido el tiempo destapa la sartén, agrega las berenjenas, vuelve a sazonar con una poquita de sal fina, tapa la sartén y continúa la cocción por 12 minutos más.

Cuando las berenjenas y la cebolla estén tiernas sácalas de la sartén y resérvalas en un plato.

Tras esto echa la mantequilla en la misma sartén que has estado utilizando para hacer las hortalizas, sube el fuego a una temperatura media-alta, nº 7 de la placa vitrocerámica y deja que se funda.

Cuando la mantequilla esté derretida añade la harina y con unas varillas remueve bien durante 2 minutos.

Transcurrido el tiempo añade la leche de poco a poco y sin dejar de remover para evitar que nos salgan grumos.

Cuando hayas acabado toda la leche, añade sal, pimienta negra molida y nuez moscada molida al gusto, vuelve a remover para que la sal y las especias se integren bien.

Seguidamente echa la cebolla y las berenjenas cocidas que tenías reservadas, remueve con las varillas para integrar bien las hortalizas y continúa con la cocción a fuego medio-alto, nº 8 de la placa vitrocerámica durante varios minutos hasta que veas que la masa se despega de la sartén.

Cuando la masa esté lista retira la sartén del fuego y vierte la masa en un recipiente grande y plano ( una fuente de pirex o cualquier tupper rectangular te servirán).

Seguidamente cubre la masa con papel film transparente (el film debe quedar en contacto con la masa) y déjala enfriar a temperatura ambiente durante varias horas.

Cuando la masa esté fría puedes optar por formar las croquetas o si lo prefieres puedes guardar la masa en el frigorífico hasta el día siguiente.

Cuando vayas a formar las croquetas, casca dos huevos en una fuente o plato hondo y bátelos.

A continuación pon pan rallado en otra fuente o plato hondo.

Seguidamente coge una porción de masa con la ayuda de una cucharilla y dale un poco de forma con la ayuda de otra cucharilla.

Tras esto pasa esa porción de masa primero por el huevo batido y después por el pan rallado.

Cuando la porción de masa esté empanada dale con las manos la forma de croqueta.

Cuando tengas todas las croquetas formadas puedes optar por congelarlas para consumirlas en otro momento o puedes freírlas directamente.

Para freír las croquetas vierte una buena cantidad de aceite de girasol en una sartén honda de tamaño mediana y caliéntalo a fuego alto nº 9 o 10 de la placa vitrocerámica.

Cuando el aceite esté caliente pero sin que llegue a humear echa las croquetas por tandas y fríelas hasta que estén doradas.

Una vez estén listas sácalas de la sartén y déjalas reposar sobre un plato llano cubierto de papel de cocina.

Las croquetas se toman calientes y recién hechas.

Espero que os gusten.

"Haz lo que puedas, donde estés, con lo que tengas". – Teddy Roosevelt