439.- Filetes de merluza rebozados con cerveza

Ingredientes para 4 personas:

• Aceite de girasol, 2 vasos (para freír el pescado)
• Harina de trigo, 200 gr (si deseas un rebozado más esponjoso añade 50 gr más de harina)*
• Huevo, 1
• Cerveza rubia tipo pilsen o lager, 33 cl (una lata)
• Filetes de merluza frescos o congelados, 8
• Levadura química (polvo de hornear), 1 cucharadita rasa
• Pimienta negra molida, 1/2 cucharadita
• Sal, 1/2 cucharadita

*La cantidad de harina depende de la textura que quieras conseguir, si deseas un rebozado crujiente y ligero debes poner menos cantidad de harina (para la cantidad de cerveza que os he indicado, debes poner 200 gr de harina para un rebozado crujiente), si deseas un rebozado muy esponjoso añade 50 gramos más de harina.

Utensilios:

• Bol amplio
• Papel de cocina
• Pinzas de cocina
• Plato llano
• Sartén grande
• Varillas manuales

Elaboración:

Si has comprado los filetes de merluza congelados, descongélalos debidamente siguiendo las instrucciones del paquete.

Una vez estén descongelados, quítales el exceso de agua secándolos con un trozo de papel de cocina, después de esto resérvalos.

A continuación echa la cerveza en el bol. (Yo la tuve que medir antes de echarla en el bol porque el botellín era de medio litro)

Seguidamente agrega el huevo y bátelo hasta que la mezcla esté espumosa.

Tras esto añade la harina poco a poco, batiendo vigorosamente para evitar que se formen grumos.

Después añade la levadura química y vuelve a batir.

Por último añade sal fina y pimienta negra molida al gusto.

Una vez tengas la masa lista, vierte el aceite de girasol en la sartén y caliéntalo a fuego alto, nº 9 de la placa vitrocerámica.

Cuando el aceite esté caliente introduce cada filete de pescado en la masa y échalos en la sartén. Fríelos por ambos lados hasta que tengan un aspecto dorado y crujiente.

Tras esto sácalos con tus pinzas de cocina y déjalos reposar sobre un plato llano cubierto de papel de cocina para eliminar la grasa sobrante.

Sirve enseguida.

"Mi conciencia tiene en mí mas peso que la opinión de todo el mundo". -Cicerón.